Suerte, maldita suerte

A principios de la 1era Era había una aparente calma en el mundo de Drannor, era como si la paz reinara con armonía y amor, sin embargo no todo era quietud. Cuentan las leyendas que existió una hechicera que mantenía practicas poco ortodoxas bajo una segunda identidad, la inquietud que la motivaba a vivir de esta manera era encontrar el eslabón perdido entre la Muerte, La vida y la magia, y por poco lo logra. Era descendiente de una familia influyente en el reino, tenia su hacienda bastante grande a las afueras de la citadel, poco a poco fue quedando sola en esa vieja mansión, el último sirviente que trabajó ahí asegura que ella fue quién mato a cada miembro de su extinta familia, idea que solo pudo expresar una sola vez ya que al siguiente día le dio una rara enfermedad y perdió el habla, la vista y escuchaba con dificultad, vaya suerte la del pobre muchacho.

En aquellos días, no se sabía si los rumores eran ciertos o solo eso, rumores, ya que su manera de actuar mezquina y errante no ayudaba a crear un juicio positivo acerca de Mirthe. Después de su muerte, varios hechiceros y clérigos acudieron a la mansión que se veía vieja, descuidada y escabrosa… ahí descubrieron la verdadera obsesión sobre Mirthe, el vestíbulo principal había sido readaptado como sala de operaciones e injertos animales y mecánicos, sólidas armaduras de metal seccionadas con cuidado sujetas a animales ya putrefactos, indicios de magia por doquier, un olor intenso y asqueante, por otro lado híbridos humanoides alaridos que a base de cueros y correas se le habían adherido armaduras ya bastante oxidadas, en el patio trasero, se podía observar vestigios de lo que algún día fue un hermoso jardín, los bultos de tierra repartidos al azar acompañaban a viejas fosas con restos de esqueletos que se aseguraba eran sus padres,  en el centro del Jardín, la fuente fue adaptada como altar y se podía observar un símbolo que no pudieron identificar.

Símbolo de la deidad de Wee Jas

Diosa de la muerte y la magia, es legal neutral. Sus títulos incluyen Dama Severa, Diosa Bruja y Guardiana de la Muerte. Se trata de una deidad exigente que disfruta de la obediencia de sus fieles. Sus pocos templos estan lejos unos de otros, pero la diosa cuenta entre sus fieles a muchos hechiceros y magos poderosos (nigromantes entre ellos). Sus dominios relacionados son Magia,Muerte y Ley. Su arma predilecta es la daga.

El clérigo superior de la capilla al ver semejante escena mando quemar el lugar, para borrar todo rastro de lo sucedido y evitar así la propagación de estas prácticas por demás malditas, se le atribuyo el adjetivo de loca y poseída a Mirthé. Después de varios eones, la historia se fue transformando hasta que se le perdió el significado, o mejor dicho el miedo a ese extraño lugar, así que en cualquier momento podría ser interrumpida la calma la pregunta era, ¿Quién sería el indicado? ó ¿Quién sería el desafortunado? un pequeño convoy de jóvenes aspirantes de magos visitaron las ruinas de la mansión, no encontraron nada de valor solo deshechos quemados y consumidos por el tiempo y una daga quemada y teñida de rojo, lo que no presentó ningún temor para la hija de Helios y de la nereida Perseis, su nombre era Circe. Al momento de que su mano empuña aquella daga esto fue lo que escucho muy dentro de su corazón y en lo mas profundo de su alma