lunes, 8 de septiembre de 2014

Llego el dia


-El pasado es más presente cuando no olvidamos de dónde venimos y a dónde vamos. Los valores son más fuertes cuando sabemos dónde estamos parados. La sabiduría crece cuando comenzamos a escuchar y dejamos de hablar.- fueron las palabras de nuestro Kami (?) antes de dejar este plano, antes de volverse polvo estelar y ser parte del universo.  

Shihan Amotonk fue el maestro de ceremonia el día de la graduación de mi hermana menor, Suzukee, ella culmino su entrenamiento básico para ser Sensei. Yo había pasado hace tiempo por esa etapa, ahora como Soke Katsumoto(heredero líder del clan Katsumoto) tenía la responsabilidad de supervisar al clan de mis ancestros.

-Hermano, hermano!!!- corrió Suzukee a mi brazos después de terminada la ceremonia. Hace tiempo que nuestra madrea había muerto al momento de dar a luz a mi hermana. Mi padre Shihan Sifu Katsumoto ya era un hombre muy maduro cundo nos procreó a mi hermana y a mí, ahora el ya era un anciano el cual quiso en vida heredarme el clan y el disfrutar de sus últimos días en paz. Pasaron no más de 7 meses desde que me entregaron el cargo del clan cuando llego un caballero elfo buscando a mi padre.

-Buen día Sr- dijo aquel caballero el cual portaba un armadura completa y muy bien cuidada, podria decir que algún dios la había tocado con sus mano.

-Buen día Forastero, bienvenido al reino de Ogin y bienvenido a la dojo Katsumoto. Que puede un elfo de los bosques buscar en terreno tan alejado de sus tierras?- pregunte mientras hacia la señal de que le dieran de beber al caballero.

-Busco al Shihan Sifu Katsumoto, el cual debe ser su padre ya que usted tiene el mismo semblante de su esposa-

Aquello me sorprendió ya que mi padre decía eso, mas nunca a los extraños solo a los miembros del clan. Aquel comentario me sorprendió y me hizo indagar más para saber más de aquel sujeto.  

-¿Cuál es el nombre de aquel que conoció a mi madre?- pregunte viendo al sujeto.

-Me llaman de varias maneras, Caminante de Drannor, El Viajero, Trotamundos pero mi nombre es Aramil Nailo.- terminando de decir esto agradeció haciendo una reverencia completa a la chica que le llevo el agua y después a mí.

Mi padre estaba en el jardín podando sus plantas mientras meditaba en cómo mejorar la kata de la casa Katsumoto (Lag-nha) y mi hermana estaba con el practicando la misma. 

-Pues bien Caminante de Drannor, preguntare a mi padre si puede recibirle ya que ha estado un poco delicado de su salud y cualquier sobresalto le puede afectar.- Espere a ver que decía y solo movió su cabeza con un gesto de aprobación.

Fui personalmente a decirle a mi padre lo que pasaba y su semblante cambio de manera abrupta era de felicidad y de preocupación. Pidió que se le dejara entrar y se le tratara como huésped de honor que por favor le dieran una cuarto y tomara un bano para después hablar con el además de pedir que se preparara un lechón, ensalada, pan con levadura y sopa de algas con esencia de flor de loto.

Di la instrucción de mi padre y personalmente fui con Aramil, el cual aún se encontraba sentado esperando por mi respuesta. Le pedí que me siguiera y lo que mi padre había dicho, llegamos hasta su cuarto y ya tenia el baño preparado para el junto con ropa limpia. Poco menos de una hora paso cuando Aramil esperaba en la puerta principal para ver a mi padre. Lo conduje a el, cuando se vieron vi como las lágrimas brotaron de los ojos de ambos y se dieron un fuerte abrazo. Mi padre ordeno que los dejáramos solos. Platicaron por varias horas de repente se escudaban carcajadas y en otras ocasiones solo el aire se escuchaba.

Se levantaron y se dirigieron al comedor, allí los esperábamos. Mi padre nos platicó una cuantas aventuras por las cuales habían pasado ellos dos y mi madre juntos con otros, lo cual despertó mucho interese en mi hermana y en mí. La velada se hizo muy larga hasta que mi padre pidió ayuda para ir a dormir.

-Hiroyuki, Suzukee y Aramil, mañana es un día importante así que temprano los veré.- nos dijo mientras nos despedíamos.

Antes de dormir Suzukee vino a mi cuarto y me comento lo emocionada que estaba por las aventuras de nuestros padres y que estaba intrigada en saber el motivo del porque dijo eso nuestro padre, le confesé que yo también.

Paso la noche, el sol despuntaba cuando llegamos a la sala principal de la casa en donde esperaba mi padre y Aramil. Practicamos la kata, como es costumbre, he invitamos a Aramil a participar, pésimos movimientos pero lo intento, después partimos aun lugar muy bello en una pequeña montana por donde pasa un riachuelo y los arboles dan sombra en el cual mi padre normalmente medita. Mi padre pidió a Suzukee que preparara el té, después del primer sorbo nos dijo –El tiempo ha llegado en que la Gran Madre reclamara lo que es suyo, toda la creación, todo su hijos los Kamis de este plano y de los otros tendrán que rendir cuentas de sus actos. Los pasos que se darán serán cruciales en las vidas de todos. Hace tiempo cuando naciste tu Suzukee-voltio a ver a mi hermana y sus ojos estaban llenos de lágrimas - Tu madre y tu estaban a punto de morir. Cuando creía todo perdido se me manifestó La Gran Madre y me ofreció salvar la vida de una de ustedes si lograba comprender sus salmos. Así que ellas las puso a dormir por año, en el cual logre aprender y enamorarme de la Gran Madre. Una noche antes de que se venciera el tiempo impuesto por ella soñé con su madre donde ella me decía que tu fueras las elegida ya que ella nos cuidaría desde el cielo.

Llego el día, ella estaba lista desde antes que yo llegara. Tu Suzekee estabas en sus manos y tu madre estaba sentada al lado de ella, tu madre te besaba y jugaba contigo.

La Gran Madre hablo: Sifu, has elegido y elegiste sabiamente ya que la semilla dará frutos los cuales inundaran y harán crecer a tu pueblo como la nubes en el cielo. Uno de tus hijos representa a tu casa en el día de la Revelación, tendrás que prepárate para ese día. – mi padre hizo una pausa muy larga y Aramil le ayudo a concluir de una manera rápida y sin rodeos. – El linaje de la familia Katsumoto tendrá su representación en el día de la Revelación, es un futuro incierto y puede ser hasta doloroso, en sus venas corre la gracia de la Gran Madre sean dignos representantes.-

Hice una reverencia a mi padre y solicite su autorización para representar a la familia en esta misión -  será un honor para mí poder representar a la familia y a ti en esto, sé que soy su único hijo varón pero mi hermana es muy joven para esto y a ella le falta más entrenamiento, no digo que no sea capaz sino que aún le falta más experiencia. –

Mi padre acepto, me bendijo y me ordeno que prepararas las cosas. Solicito a Aramil una semana para poder preparar todos y despedir a su hijo. Aramil accedió entregándome un mapa en el cual me indicaba como llegaría a un lugar llamado Ciudad Arcana, allí estaría un grupo con el cual me reuniría.

Mi padre y hermana pasaron eso días conmigo, hablamos de todo y de nada. Se celebró una cena en honor de nuestro Kami y mío. Empaque un par de camisas, un sombrero, mi vocación de aventurero,
seis consejos,  siete fotos, mil recuerdos. Empaque mis ganas de quedarme. Dijo adiós con una mueca disfrazada de sonrisa y le suplique a Kami el resguardo de los míos.

1 comentario:

Dungeon Master Jhering dijo...

Ok, buen comienzo, algunas fallitas de tiempos gramaticales y algo de errores ortográficos, pero veamos que nos dicen una segunda historia que nos pueda localizar donde empezaste a jugar, para acoplarlo, en el siguiente rol rediseñamos tu entrada. Una disculpa por no leerla antes.

Pediria de favor que avisen en el grupo cuando suban historia porfavor.

1000 fps.